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El martes 2 de abril el diputado priista
Manlio Fabio Beltrones propuso reformar el artículo 27 constitucional
para permitir que ciudadanos extranjeros puedan adquirir legalmente
propiedades inmuebles en las playas y litorales mexicanos. Actualmente
la ley prohíbe a los extranjeros poseer tierras en una franja de 50
kilómetros en las costas y 100 kilómetros en las fronteras. Con la
reforma se eliminaría esta restricción siempre y cuando las propiedades
de los extranjeros sean de uso residencial y no comercial.
Para el diputado sonorense, esta medida
pondrá fin a la simulación a que históricamente dio pie la prohibición
de que los extranjeros adquiriesen terrenos en las costas mexicanas,
pues en los hechos éstos recurren a “intermediarios que a través de
fideicomisos, sociedades anónimas y prestanombres han lucrado con la
prohibición constitucional que actualmente restringe el dominio directo
de los extranjeros de las playas del país”. Beltrones Rivera señaló que
su propuesta busca dotar a México de “un instrumento jurídico adicional
para promover la inversión productiva, el empleo, el crecimiento y el
desarrollo regional”.
Al defender la iniciativa de su
correligionario, el diputado oaxaqueño Martín Vásquez Villanueva dijo
que “La falta de certeza jurídica, derivada de una legislación que ya no
corresponde a la realidad, ha propiciado un descenso sostenido de la
inversión extranjera directa y una pérdida correlativa de empleos: en el
2012 la inversión foránea descendió en un 35 por ciento respecto al
2011, es decir, más de un dólar de cada tres dejó de inyectarse a la
economía mexicana…”. Asimismo, señaló que “Necesitamos dar facilidades a
la inversión productiva, como se hace en los países
industrializados, donde hay empleos suficientes y sus jóvenes no tienen
que viajar a otras naciones”, pues en la mayoría de los países de la
Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos no existen
restricciones como las que contempla actualmente la Constitución
mexicana.
Sin embargo, según datos de la propia OCDE, de los siete países más industrializados del mundo únicamente Japón tiene una tasa de desempleo más baja que México (5.4 por ciento), y la tasa promedio para los 30 países que integran dicho organismo es de 8.2 por ciento.
Por otra parte, si según ambos diputados los extranjeros ya adquieren
todas las propiedades que desean a través de intermediarios, no se ve en
qué consista la ventaja para México de que ahora puedan registrarlas
sin recurrir a subterfugios legales. Tampoco es evidente qué impulso
podría tener la “inversión productiva” si las propiedades de los
extranjeros serán de uso residencial.
El principal argumento para la reforma
propuesta es que con ello se pondría fin a la simulación que crea una
“distancia que suele separar a la realidad fáctica de la legislación
positiva”. En la interpretación de los diputados, si se sabe que la ley
es violada, la respuesta debe ser derogarla para volver legal lo que
ahora es un delito y no hacerla cumplir y castigar a los delincuentes.
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